Consumo de cigarrillo: componentes tóxicos

Tomando conciencia del problema

El proceso de dejar de fumar no es fácil. Un primer paso es adquirir información sobre el tabaquismo y cómo éste nos afecta, así como tomar conciencia sobre el lugar que el cigarrillo tiene en el día a día y por qué es un problema

También es útil observar a otras personas fumadoras, prestando atención especialmente a los aspectos negativos de la adicción (sí, leíste bien, de la adicción). Muchas veces se cree que el fumar es una elección personal en lugar de una adicción, es decir, quienes fuman no se consideran dependientes de una sustancia.

Se suele tener una creencia casi mística de que “algún día”, “de alguna manera”, llegará un momento mágico que será absolutamente perfecto para dejar de fumar. Quien fuma tratará de buscar todas las razones a favor y en contra del tabaco y mientras pospone el dejar de fumar.

Algunas personas esperan que mientras piensan, el problema se irá por sí sólo. Esto se da porque es más fácil desear el cambio que trabajar para que suceda.

Otras veces las personas se ven enfrentadas a las amenazas o presiones de familias y amigos y hacen un “medio intento” de cambio. El embarcarse en una acción para la cual todavía no se está preparado puede no resultar productivo.

Buscando ayuda

Afortunadamente, existen muchas herramientas y equipos de salud que pueden acompañar a quien desea dejar el tabaco. Un primer paso es registrar cuándo y cuánto se fuma, siguiendo los pasos que se proponen en este manual.

https://bancos.salud.gob.ar/recurso/manual-de-autoayuda-para-dejar-de-fumar

Fuente: Ministerio de Salud de la Nación